Opinión

En el mundo en que vivimos, cuando las cosas no son usuales

Ya el 13 de septiembre, en el ambiente había gravedad, urgencia, desconcierto y pensé en el desconcierto que siento cuando veo los cuadros de Giorgio de Chirico

Por:
septiembre 13, 2025
Este es un espacio de expresión libre e independiente que refleja exclusivamente los puntos de vista de los autores y no compromete el pensamiento ni la opinión de Las2orillas.

Mientras caminaba con Seneca, mi perro, por los alrededores de mi casa en Van Ness el 11 de septiembre 2011 en Washington D.C.  sentí un gran desconcierto mientras miraba sola y a lo lejos la catástrofe que se dibujaba en el cielo como una columna de humo negro que venía del Pentágono. No existía relación usual con mi acto cotidiano. No entendía nada.

Ya el 13 de septiembre En el ambiente había gravedad y urgencia, desconcierto e incertidumbre. A Todo era lo mismo pero vivía en una realidad diferente y pensé en el desconcierto que se siento cuando observo los cuadros de Giorgio de Chirico.

Gioergio de Chirico fue un pintor que creó el arte Metafísico. donde la cotidianidad es la misma, pero donde existe un silencio inexplicable y un misterio más allá de lo simplemente normal. Aparece el enigma, el tiempo es otro, el reloj no parece contar las horas. ¿Acaso se paró la rotación de la tierra y desaparecieron los seres humanos? Todo permanece pero, el mundo cambió y creo que nosotros somos los mismos-

 - En el mundo en que vivimos, cuando las cosas no son usuales
Estación de Montparnese (La melancolía de la partida),1914

.Giorgio De Chirico nació en Grecia en 1888 por casualidad del destino. Sus progenitores italianos estaban allá porque su  padre trabajaba con los ferrocarriles griegos. Tal vez, el tren sin destino en el camino que aparece en sus cuadros, puede ser un recuerdo de esa vida sin rumbo del que vive cuando muere.  

Muere su padre Evaristo de Chirico y su madre vuelve a Italia, mientras envía a su hijo a estudiar a Alemania en la Escuela de Bellas Artes de Munich en 1906. Allá absorbe la fuerza simbolista de los pintores del siglo XIX como el suizo Arnold Bocklin y alemán Max Klinger y más allá de la pintura, recoge el pensamiento devastador de dos grandes filósofos que cambiaron el sentido y la cosmovisión del hombre del siglo XX: Federico Nietzsche y Arrnold Schopenhaur. Bases suficientes para intentar cambiar el mundo.

 - En el mundo en que vivimos, cuando las cosas no son usuales
Piazza de Italia, 1913

Llegó a Paris en 1911  y de Chirico comenzó a pintar su mundo Metafisico, de plazas vacías, donde la luz del sol es tímida mientras la sombra del atardecer es larga y portentosa. La presencia humana es casi imperceptible, mientras la arquitectura clásica representa el ideal de la belleza de un tiempo muerto. Las esculturas y los maniquíes son hombres sin nombre en una plaza que está realizada con cierta irregularidad en su geometría. La pintura, técnicamente estudiada, llega a tener tonos muy planos y desolados. La luz del crepúsculo resulta temerosa en medio de una soledad con un silencio incólume.

 - En el mundo en que vivimos, cuando las cosas no son usuales
Los dioscuros, 1974

De Chirico, fue un precursor del Surrealismo y en ese mundo de ideas y con Freud entraron los sueños a hacer parte de una nueva realidad de la mente. André Breton el promotor y dueño de un pensamiento tan libre, fue un líder severo que creó todo tipo de batallas entre la intelectualidad francesa y la sabiduría alemana. Nadie pudo ser diferente. 

Anuncios.

Anuncios.

0
Los comentarios son realizados por los usuarios del portal y no representan la opinión ni el pensamiento de Las2Orillas.CO
Lo invitamos a leer y a debatir de forma respetuosa.
-
comments powered by Disqus