Carlos Ramón González se convierte en el primer peso pesado del Gobierno Petro que cae a costa del escándalo de corrupción de la Unidad Nacional de Gestión de Riesgo (Ungrd) después de que el Tribunal Superior de Bogotá ordenara una orden de captura en su contra por los delitos de peculado, cohecho y lavado de activos.
Pero una vez el nombre del empresario y cofundador del partido Alianza Verde fue vinculado al caso de los ochenta carrotanques que compró la Ungrd para abastecer de agua a La Guajira y que destapó el escándalo más grande del Gobierno llevándose por delante a quienes, para ese entonces, eran el director y el subdirector de la entidad, Olmedo López y Sneyder Pinilla -ya condenados- Carlos Ramón González empacó maletas y viajó al exterior.
En la cúspide, Carlos Ramón González fue el hombre de la chequera y los puestos clave en el Gobierno. El presidente Petro le dio juego desde el comienzo y lo favoreció con un cargo clave al lado suyo en el Palacio de Nariño como Director del Dapre. Le reiteró su confianza, nombrándolo en otro cargo de alto nivel en la Dirección Nacional de Inteligencia.
Carlos Ramón González escogió al curtido penalista Iván Cancino
Desde un paradero desconocido, que se rumora sería Nicaragua que no tiene extradición con Colombia, Carlos Ramón González confió en el penalista Iván Cancino para que lo defendería en Colombia mientras él asistía a las audiencias de manera virtual donde se mostró un hombre agobiado que, descompuesto, ya no era el poderoso político que volvió sus contratos con el Estado un negocio redondo como se lo contamos acá: La fortuna de Carlos Ramón González, un político enredado vuelto empresario millonario
Apenas el abogado Cancino había aceptado su labor como defensor ya la estaba ejerciendo a través de su cuenta de X para aclarar que la renuncia de Carlos Ramón González a la Dirección de Inteligencia, jamás sería un acto de reconocimiento de responsabilidad, sino de altura política y personal.
En un inicio Cancino señaló que el grueso de las acusaciones provenían del testimonio de Olmedo López, exdirector de la Ungrd, alegando que para negociar su principio de oportunidad había envuelto a su cliente en un calumnia al acusarlo de dirigir recursos de la Ungrd de más de cuatro mil millones de pesos para lograr votos en el Congreso en favor de iniciativas gubernamentales. Siendo el único pecado de Carlos Ramón González, ser el director del Dapre en el momento donde se conspiraba un acto de corrupción entre congresistas y alto funcionarios del Gobierno.
El abogado Cancino tenía una carta a su favor: Sneyder Pinilla quien nunca declaró contra Carlos Ramón González y despertó cuestionamientos sobre las acusaciones de Olmedo López. Pero no le resultó y ahora se prepara para defender a su cliente quien pasó a ser un prófugo de la justicia después de que el Tribunal Superior de Bogotá ordenara su captura así como lo hizo en su momento con el presidente del Senado, Iván Name y el presidente de la Cámara, Andrés Calle; una lista a la que hoy se suma un Carlos Ramón González que va en caída libre de pesos pesados del Gobierno que caen en el escándalo de la Ungrd.
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