Cuando de pizza se trata, se sabe que los italianos son los inventores y reyes en cuanto a sabor, recetas, texturas y todo en torno a esta famosa preparación. Sin embargo, eso no significa que en el mundo entero no se hayan adueñado a su manera de la receta. En Corea, Estados Unidos e incluso Colombia se han creado muchas variaciones, opciones y restaurantes. En Bogotá, por ejemplo, existe una gran variedad de restaurantes italianos que venden pizzas exquisitas pero no con piña, pues para ellos es un ‘insulto gastronómico’ a sus raíces. Sin embargo, existen quienes la aman, y para ellos es que contamos cuál es una de las mejores pizzas hawaianas de Bogotá, con jamón york y piña asada al ron.
Aunque por su nombre mucha gente cree que nació en Hawái, no es así: se originó en Canadá. Y el culpable fue un cocinero griego, que en 1962 la añadió a la pizza de su restaurante. Su nombre era Sam Panopoulos. Según el mismo chef, las opciones de pizza en aquel entonces eran limitadas, y la gente no se atrevía a agregar nada más que pepperoni. Lo que no sabía es que crearía un sabor que se volvería muy famoso en todo el mundo, incluyendo a Colombia.
¿Cuál es una de las mejores pizzas hawaianas de Bogotá?
Se encuentra en Attic & Keller, en la Cr. 13 No. 75-51, una imponente casa de estilo Tudor que transporta al siglo XVI. Su pizza hawaiana tiene salsa blanca, jamón york, queso mozzarella, piña asada al ron y pistachos, por $44.000. Es un gastrobar ‘cuatro en uno’. El primer ambiente es el ático, en el que se puede disfrutar de tragos clásicos y coctelería de autor. El segundo es el sótano, ideal para los noctámbulos; de jueves a sábado hay presentaciones de DJ.
Luego está el tipi, que alberga varias mesas y sillas de formas, colores y estaturas diversas, con la posibilidad de incluso sentarse en almohadones o pufs; perfecto para pasar la tarde, tomar una copa de vino o cenar. Por último, el Taller de Cabo, un salón para almorzar o cenar con una barra. El rango de precios de este gastrobar oscila entre los $22.000 y $60.000.
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