La historia de la boyacense que cubrió con lana de oveja la nave espacial Apolo XI que llegó a la Luna

Raquel Vivas trabajó para la NASA tejiendo su lana de oveja para que soportara las bajas temperaturas y protegiera a los astronautas contra incendios

Por:
agosto 09, 2025
La historia de la boyacense que cubrió con lana de oveja la nave espacial Apolo XI que llegó a la Luna

En los pueblos del norte de Boyacá nunca se imaginaron que la lana de sus ovejas llegaría a la luna primero que la gente que vive en la región. La responsable de este acontecimiento se llama María Raquel del Carmen Vivas Rincón, una mujer nacida en Florencia, Boyacá, en el año 1901, la cual llevaba el arte del tejido en la sangre, pues su madre fue merecedora de una mellada de oro por sus tejidos de algodón hechos a mano.

Los que conocieron a Raquel la describen como una mujer bastante seria, pero a su vez, muy generosa que no necesitó de alardes para que, sin aspavientos tejiera su camino hasta convertirse en el insólito vínculo tecnológico y comercial que, en plena Guerra Fría, unió a estadounidenses y rusos.

Raquel comenzó con una modesta fabrica en su tierra natal y luego se trasladó al norte de Bogotá a una de las esquinas del parque fundacional de Usaquén, donde todavía se ve el viejo aviso con el nombre de su fábrica ‘Huatay’. En donde trabajaba con lana de ovejas provenientes de pueblos boyacenses como el Güicán de la Sierra y El Espino, zonas de alto paramo a más de 3500 metros sobre el nivel del mar, muy cerca del Nevado del Cocuy.

 - Raquel Vivas, la boyacense que cubrió con lana de oveja la nave espacial Apolo XI que llegó a la Luna
Cartel en conmemoración a Telas Huatay. Foto: Gabriel Eduardo Cortés Rincón

Las ovejas no son nativas de Colombia, estas llegaron al país producto de la colonización, sin embargo, al cambiar de tierra también cambiaron de genética, tanto así que las Romney Marsh que llegaron a los paramos boyacenses, se adaptaron de tal modo que su pelaje se volvió mucho más grueso para aguantar las bajas temperaturas. Raquel conocía el valor que tenía esta transformación genética y supo aprovecharlo.

El 27 de enero de 1967, luego de que el Apolo I sufriera un incendio que dejó incinerados a los 3 astronautas que iban dentro de la nave, la NASA le encargó a Jack Lenor Larsen, diseñador textil estadounidense, conseguir una tela que soportara las fuertes temperaturas de la nave. Para ese momento, según se sabe gracias a la única entrevista que le hicieron a Raquel Vivas, la empresa Telas Huatay ya llevaba más de 10 años exportando sus telas a diseñadores de New York que, a su vez, se las vendían al Gobierno norteamericano, por lo que, con las telas de Raquel ya se había forrado el interior del avión presidencial de Richard Nixon y amplios salones en el cuarto y quinto piso de la Casa Blanca.

 - Raquel Vivas, la boyacense que cubrió con lana de oveja la nave espacial Apolo XI que llegó a la Luna
Grissom, White y Chaffe fueron los primeros astronautas en ser tripulantes de una nave del programa Apolo. Fallecieron el 27 de enero de 1967 realizando la simulación del lanzamiento. Foto: NASA

Ya con esto, las telas de Raquel no eran desconocidas en el mercado norteamericano, de ahí que cuando se postuló a la licitación que estaba a cargo del diseñador textil de la NASA, la lana de las ovejas boyacenses tejida por Raquel ganara el concurso, luego de que fueran sometidas a una prueba de 48 horas donde se determinó que aquella la lana de oveja boyacense cumplía con 3 criterios para ser para ser incluida en la nave espacial: era resistentes al fuego; era térmica y, al mismo tiempo, antiestática, lo cual ayudaba a disipar las cargas eléctricas y reducir la posibilidad de un incendio, manteniendo el calor.

 - Raquel Vivas, la boyacense que cubrió con lana de oveja la nave espacial Apolo XI que llegó a la Luna
Facsímil digital del reportaje titulado: Viaje a la luna con olor a
oveja. Tomado de: bit.ly/1969ELTIEMPO

Ya ganada la licitación, Raquel y sus 12 empleados se pusieron manos a la obra y tejieron durante 3 meses alrededor de 3.200 metros de lana que exportaron a los Estados Unidos, para recubrir el módulo de comando del Apolo XI. Aunque no se supo cuánto dinero recibió Raquel por aquel proyecto, como señal de agradecimiento, el Gobierno de los Estados Unidos la invitó a ella y a su sobrino al despegue en Cabo Cañaveral del histórico Apolo XI. Luego de este suceso sus tejidos fueron apetecidos, literalmente, por todo el planeta. Siendo así como sus prestigiosas telas fueron exhibidas en importantes exposiciones en Japón.

Pero, lo que más llama la atención es que en el Museo de Antropología e Historia ubicado en Floresta, Boyacá, la tierra natal de Raquel, se encuentra un traje espacial que ella misma elaboró con sus telas para un cosmonauta ruso como parte de un programa de la Unión Soviética. De este suceso, no se sabe nada, puesto que Raquel fue una mujer que supo mantener muy en secreto todos sus movimientos. Pero, lo que demuestra la confección de este traje espacial ruso es que ella trabajaba para la Unión Soviética y los Estados Unidos sin ser una espía. Un verdadero fenómeno en los álgidos tiempos de la Guerra Fría.

 - Raquel Vivas, la boyacense que cubrió con lana de oveja la nave espacial Apolo XI que llegó a la Luna
Fotografía tomada al interior del Museo de Antropología e Historia
ubicado en Floresta, Boyacá.

El hecho de que las telas de Raquel fueran de tan alta calidad, también ha sido un completo misterio, mientras que algunos dicen que toda la magia se debía a los elementos que ella usaba para fijar el color a las telas, otros dicen que es por el tipo de lana que tienen las ovejas en esa región del país, pero a ciencia cierta, la verdad se la llevó Raquel a su tumba en 1995 a los 94 años, pues nunca tuvo hijos, ni tampoco se casó.

Luego del fallecimiento de Raquel, la fábrica Telas Huatay quedó en manos de familiares, pero en el 2001 la vendieron a un tercero el cual solo conservó el aviso de la histórica y prestigiosa empresa de telas boyacenses.

También le puede interesar:

Anuncios.

Anuncios.

0
Los comentarios son realizados por los usuarios del portal y no representan la opinión ni el pensamiento de Las2Orillas.CO
Lo invitamos a leer y a debatir de forma respetuosa.
-
comments powered by Disqus