Los jeques de Emiratos Arabes pusieron a Colombia en su radar desde el 2006, en el gobierno de Álvaro Uribe. Resultó definitiva una reunión de Joselito Guerra de La Espriella con Tahnoon bin Zayed Al Nahyan, que con los años se volvería un rostro conocido por el negocio de Nutresa con los Gilinski pero antes había apoyado el proceso de paz de Santos y ahora firmaron con Petro un Acuerdo Integral de Asociación Económica.
Lideran el proyecto de BioNube, un mega data center en Santa Marta que se desarrollará en un predio del gran campus de la Universidad del Magdalena con una inversión inicial de $ 65.000 millones. Todo apunta a la creación de una infraestructura de nube soberana, que busca garantizar la seguridad de los datos estatales.
De la mano de los emiratíes, el gobierno Petro busca que Colombia sea un epicentro tecnológico, referente en la investigación y desarrollo científico y, además, impulsar la inteligencia artificial en el país. El embajador en Colombia es desde el año pasado Mohamed Abdullah Bin Khater Al Shamsi quien tiene la tarea de volver realidad el acuerdo firmado.
Viejos conocidos con distintos gobiernos de Colombia
El primer interés árabe se centró en la mina de oro de Santurbán. Con la asesoría del ex primer ministro británico Tony Blair quien tenía acceso a la información de Planeación Nacional a través de un contrato de 2013, se concretó la obtención del título minero que estaba en manos del banquero brasileño Elke Bautista, dado en pago a los árabes tras la quiebra del enorme grupo sudamericano en 2014. Cuando Santos fue a Dubai en 2017 recibió no solo los dólares para la paz, sino USD 1.000 millones para la inversión adicional en la mina de oro.
Más tarde el país se familiarizaría con los emiratíes cuando el jeque Tahnoon bin Zayed Al Nahyan participó a través de International Holding Company (IHC) en la OPA de la multinacional de alimentos Nutresa con el empresario Jaime Gilinski logrando la toma de la propiedad que estaba en manos del Grupo Empresarial Antioqueño (GEA). En el Foro de Davos de septiembre 2022, inesperadamente, los árabes salieron y la totalidad d la empresa quedó en manos del banquero caleño.
Los árabes también han puesto su lupa sobre las esmeraldas de Coscuez. La multinacional Fura Gems, con sede en Dubái, especializada en la producción de piedras preciosas, llegó en 2018. Con la subastadora inglesa Bonas, ya han realizado seis subastas de las piedras que se comercializan en bruto, y que solo en esta ocasión son 200.000 quilates de piedras obtenidas en las 46 hectáreas en San Pablo de Barbor, Boyacá. En esta ocasión, el presidente de la Junta de Fura Gems, Gaurav Gupta, anunció el relevo del CEO Dev Shetty y la focalización del negocio en la marca.
Y el año pasado el impulso mayor en esta relación lo dio la llegada de su aerolínea Emirates Airline, una de las aerolíneas más grandes a conectar a Bogotá con Dubai, un destino cada día más atractivo para los colombianos.
Además: La gigante árabe que entrará a Colombia con oferta de vuelos a Dubái
Anuncios.
Anuncios.
