Los hermanos Arce son viejos conocidos en el Cesar por haber hecho del sector salud un negocio con cuantiosos contratos del sector público, pero además por la habilidad de estos dos hermanos, Carlos Humberto y Jaime Arce en mantener relaciones con los políticos. Son dueños de Clínicas Médicos S.A , una red de IPS –institutos prestadores de servicios de salud- que operan en todo el departamento.
En 2023 reiteraron su apoyo a Cielo Gnecco a través de su candidata a la Gobernación del Cesar, Elvia Milena Sanjuan, como lo habían hecho en el pasado con su hijo Luis Alberto Monsalvo Gnecco. Pero también lo hacen con cargos menores como fue su apoyo al guajiro Oswaldo Juan Díaz Ávila quien logró la votación más alta de los conservadores al Concejo de Valledupar superando inclusive a Wilber Hinojos, el concejal conservador que tenía el Cabildo.
l Le recomendamos: Ape Cuello, el cuestionado congresista que no le falla a Petro y a quien la justicia no ha logrado atajar
Su emporio de clínicas que genera casi 15 mil empleos empezó a derrumbarse después de que la Clínica Integral de Emergencias Laura Daniela, que tiene como representante legal a Jaime Arce, se declarará en quiebra. Los Arce deben $94.801 millones que solo podrá pagar en veinte años. No era un secreto: desde el 2018, los empleados de la Clínica Laura Daniela denunciaron el retraso de sus pagos, el mismo año en que Jaime Arce estrenó su primer Ferrari rojo, modelo 812 Superfast al que le metió $1.500 millones mientras las deudas en la Clínica superaban los $2.500 millones.

Una compra que iba en contra vía al bajo perfil que ha intentado mantener en Valledupar. No quiso trasladarse del barrio Quintas del Country, un conjunto de casas de clase media ubicado al norte de Valledupar, a el exclusivo barrio Novalito y prefirió conservar la fachada dela casa donde vive hace 10 años, comprar la manzana e integrarlas por dentro y armar una mansión protegida por escoltas las 24 horas del día. Allí guarda su Ferrari, obviamente, el único de la ciudad y que cuida como una joya que transporta en grúa para llevarlo a lavar.

La crisis de las Clínicas de los hermanos Arce
A pesar de los incumplimientos y retrasos, solo este año le solicitaron a la superintendencia entrar en reorganización. Empezaron por la Clínica Laura Daniela en la que entre 2016 y 2017 se murieron 16 bebes prematuros sin una explicación clara. La investigación de la Superintendencia de salud encontró que Survanta, el medicamento que con el que se trata a los niños con insuficiencia respiratoria especialmente prematuros, no era el original y terminaron con una multa de $781 millones pero no clausuraron el servicio y la Clínica Laura Daniela siguió funcionando .
l Le podría interesar: Mauricio Jaramillo, el hermano del Ministro de Salud que quita y pone funcionarios en el Gobierno
El mismo año de esta tragedia para 16 familias los hermanos Arce mostraron su poder con la construcción en el centro de Valledupar de una mega clínica que bautizaron Clínica de Alta Complejidad del Caribe que le sumaron al emporio que empezaron a dividirse entre ellos: Clínica Laura Daniela y la Santa Isabel quedaron con Jaime como representante legal; Carlos con la de Alta Complejidad y la San Juan Bautista que está ubicada en La Guajira.

Y fue precisamente la clínica Laura Daniela, la primera en advertir la crítica situación que la llevó a entrar en la Ley de quiebras o de insolvencia por la deuda millonaria y sin que se conozcan detalles de los documentos que han aportado a la Superintendencia de sociedades ya la gobernadora Elvia Milena Sanjuan quien no olvida su apoyo a la campaña, advirtió que el departamento está dispuesto a lanzarles un salvavidas.
l Lea también: El condenado y detenido Monsalvo Gnecco terminó premiado por demoras y sobrecostos del Hospital del Paso
Anuncios.
Anuncios.
