Aunque la excongresista asegura que fue víctima de golpizas y torturas, parece ser que sus heridas son producto de una pelea que tuvo con una guardia de la cárcel
Nadie ha introspectado tanto el cambio penal como la compañera Aída con su tesis de que lo suyo no fue una fuga de presos sino un deslizamiento por lazo humanitario
Sus peleas sirvieron para que Miguel del Rio lograra moverla a una guarnición militar en Malambo, olvidando las denuncias de amenazas provenientes de Barranquilla
La excongresista no se presentó a la audiencia ante la Corte Suprema de Justicia con una excusa de incapacidad, Char consiguió aplazar por tercera vez su indagatoria
La Corte tenía programado escuchar primero al excongresista, pero pareciera ser que tanto él como su papá y su hermano esperan que ella destape antes sus cartas