Dos atentados, dos extremos ideológicos, atacados por una misma estructura criminal. ¿Qué revela este patrón y por qué amenaza directamente la democracia?
El atentado contra Miguel Uribe no causó conmoción. La ciudadanía, emocionalmente agotada, no reaccionó con duelo, sino con escepticismo y desconfianza
El atentado contra Miguel Uribe expone cómo el odio político y la retórica incendiaria han degradado la democracia y normalizado la violencia en Colombia
Tras el atentado a Miguel Uribe, urge reflexionar sobre cómo las redes, guiadas por algoritmos que premian el odio, alimentan la polarización y dañan la democracia