Son pocas las zonas que han progresado, el resto comparte un estigma de abandono, atraso y pobreza. Además, no existe equidad y cada vez se abren más las brechas
En un país donde tener dinero está influido por la habilidad para tumbar al otro, por la rosca y los favores políticos, parece imposible salir adelante
Más que fomentar la estabilidad y el orden, las artimañas económicas del gobierno perpetúan la pobreza, sobre todo para los que nunca han tenido oportunidades