La expresidenta de Brasil Dilma Rouseff, quien mantuvo altos índices de popularidad durante su periodo en el poder, terminó salpicada por un escándalo de corrupción. Todo apunta a Petrobras. Uno de los detenidos es su ex gerente Pedro Barusco quien no vaciló a la hora de señalar a la expresidenta y a su partido político, el PT, de haber recibido cerca de US$200 millones de dólares en sobornos a cambio de contratos estatales. Por este caso son investigados 49 funcionarios de los partidos de la coalición gobierno, ntre ellos los actuales presidentes del parlamento, 32 congresistas, 12 ex diputados y cuatro ministros de la presidente Dilma Rousseff.
Anuncios.
Anuncios.
